viernes, 22 de diciembre de 2006

El guion no es solo texto

De forma lineal o trasversal la narración debe conservar la estructura básica de la historia: Un origen y un final. El espectador asiste desamparado al inicio de este viaje. El autor le lleva de la mano para enseñarle un recorrido por una estructura narrativa. Tiene que quedar claro que él sabe por donde y hacia donde va. Lo importante no es llegar hasta el final sino saber durante todo el rato que se va hacia allí. Cada secuencia debe complementar a las anteriores marcando una dirección.

La narración debe “arrastrar hacia delante” la atención del espectador. La narración tiene una dirección que conduce al espectador desde un inicio desconocido hacia un final deseado. Cada secuencia debe aportar algo nuevo a la historia en la dirección correcta. En cada secuencia la narración debe mostrar al espectador un pequeño objetivo, hacia donde se dirige la historia general. El espectador debe seguir expectante en cada momento atento a como se resuelve esa secuencia que le estará aportando algo nuevo para prever el desenlace final de la historia.

Cada secuencia debe despertar el interés por presenciar la siguiente arrastrando hacia delante. El espectador debe intuir que se le lleva hacia algún sitio. Y este debe parecerle interesante.

El espectador necesita tiempo para la reflexión. Cada cierto tiempo y sobre todo tras las secuencias fundamentales hay que dejar “tiempo” o “aire”, vacíos narrativos donde el espectador podrá analizar y ordenar en su cabeza lo que está recibiendo. Son momentos para asentarse y recrearse visualmente (sin aportar contenido). Es importante que el espectador contemple de forma activa, presintiendo y anticipándose a lo que puede suceder después o simplemente planteándose dudas con una curiosidad dinámica. El espectador tiene que recrear su “película” a la vez que está viendo la nuestra.

Hay que dejar que el espectador interprete lo que le ofrecemos aunque su interpretación no coincida con la del autor.

El montaje es narración, la música es narración, los silencios son narración.

Un guión no es solo texto.

El texto informa. Las imágenes y la música trasmite sensaciones. El texto (voz) se olvida antes que las sensaciones. El texto se olvida antes que una imagen.

Si se lee el guión literario, sin las notas de montaje, y se entiende el objetivo del documental, significa que el guión no sirve.

El texto en off debe de oírse pero no escucharse. Si el espectador percibe que tras él hay un “escritor”,
significa que no funciona.

Una buena historia no tiene que convencer sino seducir.

Si el espectador ha aguantado hasta el final, perdurará en su memoria una serie de imágenes, informaciones y sensaciones inmediatas y otras a largo plazo. Cuando recurra a su memoria para recordar el documental que vio (para contárselo a otra persona p.e.) deberán aparecer solo las sensaciones que los autores querían reflejar en ese documental, solo así se habrá conseguido un buen trabajo.

jueves, 21 de diciembre de 2006

El Patio



Una pequeña cámara digital, entusiasmo y una historia que contar.

Ver-  -Documental|El Patio

Miradas de video




Esculpir el tiempo




¿Y en qué reside la naturaleza de un arte fílmico propio de un autor? En cierto sentido, se podría decir que es el esculpir el tiempo. Del mismo modo que un escultor adivina en su interior los contornos de su futura escultura sacando más tarde todo el bloque de mármol, de acuerdo con ese modelo, también el artista cinematográfico aparta del enorme e informe complejo de los hechos vitales todo lo innecesario, conservando sólo lo que será un elemento de su futura película, un momento imprescindible de la imagen artística, la imagen total.

Esculpir el tiempo
Andrei Tarkovski

miércoles, 20 de diciembre de 2006

Dogma 2001


La idea de la que nace un documental de creación debe de contar con la pasión de su autor para poder tener el coraje de poder llevarlo a delante sin que se convierta en un trabajo de encargo.

El documental de creación nunca puede ser totalmente objetivo. El autor tiene que tomar partido y atender a sus consecuencias. Los hechos y la verdad siempre son subjetivos. Pretender lo contrario dará como resultado un trabajo poco contundente.

La idea que tiene el autor sobre un determinado documental se tiene que reflejar en la selección de los contenidos. Estos contenidos documentales y documentados son los que lógicamente marcarán el concepto de un trabajo documental. En teoría los contenidos seleccionados deben reflejar una verdad ... o unos hechos ..., pero como esto es imposible, en esa determinada selección de los contenidos (preproducción, guión y montaje) irá reflejada la intención partidista del autor y su idea de documental que pretende.

Una vez determinados los contenidos adecuados a la idea del autor esta tiene que ser reforzada por el enfoque del tratamiento. El enfoque es una cuestión de guión pero a la vez es una cuestión formal. Se puede hacer un documental sobre océanos solo con imágenes desde satélites. Se puede hacer un documental sobre la infancia contado por ancianos.

El documental de creación debe de contar siempre una historia. Una historia universal, que pueda llegar al mayor número de personas. Los contenidos podrán ser lineales o transversales, pero siempre deberán ser contados a través de una historia. Sin una historia que sustente los contenidos se podría terminar en un documental divulgativo. Si la historia termina simplemente contando los hechos, el documental se convertiría en un reportaje. Si además muestra la actualidad, sería una noticia. Estamos saturados de información. Una triste noticia nos hace llorar menos que una historia triste aunque las dos reflejen lo mismo.

La historia hay que romperla con una buena narración. La narración es la secuncialización de la historia y de los contenidos. Un buen documental tiene una buena historia. Si esta se rompe con una original narración, empezará a surgir un buen documental de creación. El silencio es narración. El ritmo de montaje es narración. La imagen es sobre todo narración. Secuencializar los contenidos es más difícil que secuencializar la historia que la sustenta. La narración sirve para ir mostrando los contenidos que una historia está soportando. Hay que pretender que unos espectadores sigan la narración de los contenidos pero habrá otros que se quedarán con la narración de la historia
Los contenidos serán originales, propios de ese único documental. El documental se hace para que trasciendan esos contenidos. Han sido documentados y se muestran en ese documental. Pero si el contenido es original o local, la historia tiene que ser universal. Esta tiene que ser atractiva, comprensible y motivadora para el mayor número de espectadores.

La narración debe “arrastrar hacia delante” la atención del espectador. La narración tiene una dirección que conduce al espectador desde un inicio desconocido hacia un final deseado. Cada secuencia debe aportar algo nuevo a la historia en la dirección correcta. En cada secuencia la narración debe mostrar al espectador un pequeño objetivo, hacia donde se dirige la historia general. El espectador debe seguir expectante en cada momento atento a como se resuelve esa secuencia que le estará aportando algo nuevo para prever el desenlace final de la historia.

Cada secuencia debe despertar el interés por presenciar la siguiente arrastrando hacia delante. El espectador debe intuir que se le lleva hacia algún sitio.

La sensación final que queda después de ver el documental es lo primero que perdurará en la memoria del espectador. La historia completa se perderá en la memoria. El orden narrativo se olvidará. Al final en el espectador solo perdurará una sensación, que durará más o menos tiempo. Una sensación que siempre le vendrá a la memoria cuando intente recordar el documental que ha visto. Crear esa sensación en el espectador y que coincida con la que pretende el autor es lo realmente complicado.

Teoria de la "Historia"

LA NARRACIÓN CINEMATOGRÁFICA

Exposición (planteamiento)
Conocemos el ambiente cotidiano del protagonista. Su vida transcurre como siempre. Es el momento en el que la “cámara” se introduce en su vida. Es el mundo ordinario

Conflicto
La continuidad de su vida cotidiana es rota por cualquier hecho. Sabemos que la “cámara” se ha introducido en su vida por esta razón.
El conflicto se convierte en el hecho desencadenante cuyas consecuencias esperamos expectantes.
El protagonista se sumerge en un mundo desconocido

Conflicto (nudo)
El protagonista adquiere algún tipo de transformación durante este viaje por el mundo diferente. Aprende sus reglas. Conoce las causas del cambio y como solucionarlo.

Desenlace
Se realiza la confrontación de donde surgirá la victoria o la muerte (en sus múltiples apariencias) Es el momento más tenso de la narración. El espectador quiere conocer el resultado final.

Final (epílogo)
El protagonista vuelve victorioso a su mundo cotidiano. La vida transcurre pero algo ha cambiado para mejor. La “cámara” muestra ese renovado mundo y el espectador hace suyo el mensaje.

Odio

Odio cada uno de los momentos en que he pensado que el montaje salvaría un proyecto mal concebido.

Odio cada uno de los trabajos concebidos por secuencias y no por tomas

Odio las entrevistas, las declaraciones y los coloquios

Odio los bustos parlantes a la cámara.

Odio la regla de los 3/4

Odio haber elogiado a un operador de cámara por grabar un plano bien compuesto

Odio cada uno de los planos que he insertado al ritmo de la música.

Odio cada uno de los momentos en los que he sido más honesto a mi empresa y al cliente que a mí mismo.

Odio haber contado con la colaboración de quien interesaba a mi empresa y no con la de quien realmente me interesaba

Odio las panorámicas. Y más las tipo 4,6,4

Odio haber perseguido el interés de mi empresa más que el mío propio.

Odio haber pensado en el espectador más que en mí mismo.

Odio enseñar y no aprender.

Odio mostrar y no crear.

Odio cada una de las horas que he dedicado de más a cada trabajo para hacerlo más correcto en vez de más perfecto.

Odio lo correcto.

Odio el equilibrio.

Odio cada uno de los planos que he insertado por ser correctos pero que no mostraban nada.

Odio cada uno de los planos que he cortado en el montaje para que no quedaran lentos.

Odio cada plano que he cortado en el montaje sin pensar si la tensión que contenía estaba anticipando al siguiente.

Odio cada uno de mis trabajos en los que la información de los contenidos prevalecía sobre la comunicación de mis intenciones.

Odio que la información tenga que estar por encima de la creación en un trabajo audiovisual.

Odio cada vez que he realizado un cambio en un trabajo por miedo a las consecuencias sobre mi empresa.

Odio haber afrontado todos los trabajos con el mismo entusiasmo.


-por PKK-
Agosto 03

Final de El Cielo Protector





Como no sabemos cuando vamos a morir, llegamos a creer que la vida es un pozo inagotable.
Sin embargo todo sucede solo un cierto número de veces y no demasiadas. En cuantas ocasiones te vendrá a la memoria aquella tarde de tu infancia, una tarde que ha marcado el resto de tu existencia. Una tarde tan importante que ni siquiera puedes concebir tu vida sin ella. Quizás cuatro o cinco veces, quizás ni siquiera eso. Y cuantas veces más contemplarás la luna llena. Quizás veinte, y sin embargo todo parece ilimitado.

Paul Bowles